[ENTREVISTA] Carole Sinclaire, curadora Museo Precolombino: "Gorros de casi tres mil años hablan de la historia del Desierto de Atacama".

La exposición “Gorros del Desierto de Atacama” abarca una serie de tocados de pueblos prehispánicos que habitaron el Norte Grande del país. Turbantes, diademas e incluso cascos, componen la exhibición en el Centro Cultural El Tranque. Carole Sinclaire, curadora del Museo Chileno de Arte Precolombino (custodio de la colección), detalla en esta entrevista el nivel de conservación de las piezas, su relevancia histórica y por qué la muestra que recorre desde el 1500 a.C. hasta el siglo XVI es imperdible.

-¿Qué te parece que itinere la muestra, que salga del Museo Precolombino?

Fantástico. El hecho que podamos mostrar piezas que además son del Norte Grande y que se puedan conocer es súper bueno. Ojalá que la exposición vaya de centro cultural a centro cultural, e incluso salga de la Región Metropolitana.

 

-¿Con qué se va a encontrar la gente que visite la muestra Gorros del Desierto de Atacama?

Se van a sorprender viendo estos objetos tan delicados hechos con tejidos, con materiales orgánicos y que puedan preservarse de tan buena manera a tal punto de decir “estos gorros son actuales, cuando en realidad son piezas que incluso tienen casi tres mil años. Pero por sobre todo, se van impresionar por el significado que estas piezas tienen. En el fondo, los tocados aluden a la identidad, a las diferencias. Los gorros eran parte fundamental de los atuendos de las personas para identificarlos y darles particularidad.

 

-Por lo que vimos, los gorros se encuentran en perfectas condiciones ¿cómo funcionó su conservación? 

Efectivamente están en perfectas condiciones, y eso se lo debemos a la aridez del desierto. Si no hay humedad, no hay descomposición de la materia orgánica. La aridez y la falta de lluvia es nefasta en muchos aspectos, pero en aspectos culturales permite la conservación de objetos que sin ello no se podrían comprender.

 

-¿Cuál es el mapa o la ubicación de donde provienen los gorros?

Norte Grande. Incluye la costa, la pampa (que es el plano, la devaluación intermedia), la sierra y el altiplano. Las piezas provienen de todo lo que es la Región de Arica y Parinacota y de la región de Antofagasta incluyendo el Desierto de Atacama.

 

-¿Por qué las piezas se tratan de un patrimonio único en el mundo?

Porque se trata de una concentración de tocados que llaman la atención en términos de calidad. Cuando se armó la colección nos dimos cuenta que la riqueza era enorme, sobre todo cuando los ves todos juntos como en esta muestra. En ese sentido, es única porque como exposición no hay otra igual, que trata además de ser una mezcla entre lo antropológico y lo artístico.

 

Alrededor de la exposición, la CCLB ha realizado una serie de actividades que van desde instancias de mediación para el Día de los Patrimonios con casi mil asistentes, hasta charlas con expertos para colegios.

En esa misma línea, los próximos días se llevarán a cabo dos talleres prácticos sobre dos de los gorros más emblemáticos de la muestra. María Patricia Romero, investigadora y conservacionista de técnicas textiles ancestrales, impartirá sesiones sobre cómo confeccionar un gorro discoidal en miniatura y un gorro de cuatro puntas en el Centro Cultural El Tranque.

 

-¿Cuál es el valor estético y técnico de los tocados?

Hay formas de hacer estas piezas que son particulares de la sociedad que las hacen. Al hablar de estética de los pueblos del pasado, se habla de equilibrio, de armonía y de una conexión que a nosotros, cientos de años después, nos hace sentido. 

Desde el punto de vista técnico hay miles de métodos que están utilizados acá y todos son muy perfectos, no hay nada dejado al azar. Técnicas como cordelería, cestería, tipos de anudados, telar, manejo de las fibras, la destreza en hilar, la destreza en teñir, los elementos que le ponen al objeto para darle sentido.

 

-¿Cuál es el gorro que recomiendas dedicar particular atención?

Es difícil, pero igual tengo mis preferidos.

Uno de ellos son los turbantes, por los complejos que son, por todo lo que tiene en términos de contenido y significado. Tienen tantos elementos, que se pueden leer como un libro.

Y bueno, en términos de perfección yo creo que los gorros de cuatro puntas también puesto que son súper difíciles de hacer. 

 

-¿Cuántas aristas tiene finalmente esta exposición?

Tiene el trasfondo histórico, la línea de lo técnico y también tiene un pie sobre qué es el arte. 

Los gorros son una ventana para hablar de las historia del Desierto de Atacama, la historias de los pueblos que habitaron el Desierto de Atacama y que hasta el día de hoy están. Eso lo hace súper interesante. La idea fue buscar la manera de abarcar lo mayor posible con los objetos materiales. Entenderlos desde su complejidad total.

 

“Gorros del Desierto de Atacama” se encuentra en el Centro Cultural El Tranque (Av. El Tranque 10.300) abierta al público de martes a domingo entre 9:00 a 19:00 horas, con entrada liberada.

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